El 19 de agosto de 1958 iniciaron sus actividades en Portsmouth, Inglaterra, el comandante, el jefe de ingeniería y cinco tenientes de navío para alistar el portaaviones INDEPENDENCIA a los que se agregaron otro jefes y oficiales y un tercio de la dotación normal el 1º de octubre de ese año. El 8 de diciembre, 16 semanas después del arribo de los primeros y solo 10 del de los segundos, el buque zarpo a una exitosa navegación de prueba con los adiestramientos realizados para operar un tipo nuevo de nave en la Armada Argentina y con los materiales y repuestos para soportar su operación en los próximos años.
El desarrollo del tema va más allá del relato especifico de la labor profesional. En forma ágil y entretenida el autor intercala diferencias entre la Gran Bretaña y la Argentina de entonces e incursiona en detalles relativos al comportamiento de ambas sociedades. De igual manera pone de manifiesto rasgos distintivos de las dos armadas.
